26 de abril de 2010

Inclusive


Te retuerces dentro de un monstruo de entrañas de barro, ahogándote.


Si te paras a pensarlo un instante, pocas veces te has parado a pensar sobre lo que piensas, inclusive si lo estás pensando ahora.


De no ser así, tranquilo, te otorgaré el título de sesgo estadístico, o bien outlier.


Olvidamos demasiadas cosas que son fáciles de recordar, y yo me inclino a creer que simplemente las olvidamos porque es mejor así. Olvidamos porque elegimos olvidar.


Desde luego que hay excusas. Pero es mucho más sencillo decir que te limitaste a olvidarlo. Las cosas importantes no las olvidarás, tenlo por seguro


Pequeños fragmentos de nosotros mismos vuelan en nuestro derredor, fingiendo no conocernos cuando les decimos un “hola, ¿qué tal?”, ingenuos e ignorantes. O crueles, también lo puedes mirar de ese modo.


Giran de forma imperceptible al ojo, hilvanados en hilos de un destino frágil. Tiras de un papel que ha sido doblado demasiadas veces y que ya no te aporta nada más que una superficie circunvolucionada de un blanco sobre el que no puedes escribir, de una pizarra que tuerce la mirada y huye de ti.


Gotas que forman es charco efímero que no llega a enternecer siquiera un poco el duro suelo, de piedra. Porque es agua, y no ácido.


Aunque no lo entiendas, sabes que esto incluye algo que me es muy valioso. Consérvalo o despedázalo, pero no te atrevas a regalárselo a nadie, porque no habrá entonces perdón que pueda sacarte de ese lugar en el que la carne chirría cuando se quema en lagos de sangre hirviendo.


Tu atrevimiento, por esta vez, me ha sorprendido. No volveré a bajar la guardia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario